Mitos y realidades sobre caídas en la construcción residencial
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Mito 1: los contratistas residenciales no se lesionan tanto como los trabajadores de la construcción comercial.
HECHO: la mitad de todos los trabajadores de la construcción que han caído a su muerte trabajaron en la construcción residencial.
Un techador de 30 años de edad estaba enrollando papel de alquitrán en un nuevo techo de brea de un cabo de 2 pisos cuando retrocedió del borde. Cayó 7 metros hasta su muerte, y dejó atrás a su esposa e hijos.
Mito 2: tienes que caer una gran distancia para matarte.
HECHO: si golpeas tu cabeza lo suficiente, puedes morir desde cualquier altura. La mitad de los trabajadores de la construcción que murieron en una caída cayeron desde una altura de 7 metros o menos. Incluso si sobrevive a una caída, es posible que quede por algún tiempo con una discapacidad.
Un pintor de 68 años murió luego de caer 3 metros desde un pequeño porche delantero de una casa de dos pisos. El pintor se cayó cuando bajó una escalera y se apoyó en una barandilla del porche podrida. Había pintado casas durante más de 40 años.
Mito 3: los trabajadores experimentados no caen.
HECHO: la edad promedio de los trabajadores de la construcción que han caído a su muerte fue de 43. Estos hombres tenían muchos años de experiencia.
Mito 4: El equipo de protección contra caídas es más un obstáculo que una ayuda.
HECHO: nada es más un obstáculo que una discapacidad de por vida. El equipo de protección contra caídas está mejorando continuamente. Las líneas de vida retráctiles permiten la máxima flexibilidad. Los anclajes de techo se pueden clavar en los miembros estructurales de los techos de madera.
Mito 5: Trabajar de manera segura es costoso.
HECHO: algunos equipos no son costosos, como estabilizadores de escaleras, soportes de barandas y kits de protección contra caídas. Otros artículos como los andamios son más caros. Invierta en este equipo, tal como lo haría con una herramienta de calidad.
“Caí y estuve sin trabajo durante 8 semanas. Estaba subcontratado. Esto fue hace mucho tiempo, pero probablemente perdí alrededor de 5,000 dólares. Un arnés me habría costado 50 dólares en ese entonces ”. —Dan, Contratista General
HECHO: Las caídas se pueden prevenir